Precauciones al reinstalar

Probé kf5... pero tocó reinstalar días después.
Aunque GNU/Linux es un sistema operativo que resulta bastante estable, incluso en sus versiones más arriesgadas y experimentales, no es raro que por andar "fedellando" acabemos rompiendo el sistema. De repente el PC no arranca normalmente o no arranca en absoluto. Y toca reinstalar.


Cierto es que el pingüino facilita las cosas. La instalación típica de cualquier distribución Linux es bastante fácil, no hace falta pasar por números de serie o farragosos sistemas de validación. También, una vez instalado el sistema -y a diferencia de otros- suele venir ya con todos los drivers y programas productivos necesarios.

Pero aún así, el usuario medio/avanzado -precisamente el tipo de usuario que suele cargarse el sistema con más frecuencia- suele añadir unas cuantas horas de personalización que en una reinstalación normal se pierden.

Comparado con Windows, donde hay cinco fases (instalación, instalación de drivers, instalación de programas básicos y utilidades, instalación de otros programas y personalización) el reinstalar Linux es algo trivial. Básicamente instalamos el sistema, añadimos otros programas y personalizamos. Pero este último paso es bastante trabajoso si queremos tener todo a nuestro gusto y funcionando al 100% como antes.

Para evitar estos inconvenientes y no perder la personalización de:
  • navegadores
  • programas del sistema, incluido el explorador de archivos
  • fuentes (tipos de letra) del usuario
  • últimos comandos utilizados en la consola
  • iconos y temas preferidos
  • archivos de configuración, como fstab, exports, grub...

Basta seguir unas simples precauciones:

  1. Tener separadas la partición del sistema (/) y la del usuario (/home)
  2. Antes de reinstalar (se puede hacer desde el live-dvd o desde otra distribución que tengamos en el mismo ordenador) abrir el explorador de archivos como administrador. Y acto seguido...
  3. Renombrar la carpeta del usuario (por ejemplo, de usuario a usuarioantiguo). Esto nos dejará reinstalar y más tarde restaurar cuanto sea necesario, desde la carpeta de fuentes hasta las de firefox o wine.
  4. Crear una subcarpeta para archivos del sistema (por ejemplo, llamada sistema y dentro de usuarioantiguo para acordarse de por qué la hemos creado más adelante).
  5. Copiar /etc dentro de la carpeta creada (usuarioantiguo/sistema). Esto nos permitirá recuperar más tarde varias personalizaciones, como algunas entradas del fstab o exports, o la personalización del grub. No suele ser buena idea sobreescribir alegremente, cuando reinstalemos, los archivos recién instalados por los viejos, porque puede haber variado algo y no arrancará correctamente el ordenador. Es mejor abrir los archivos y copiar las entradas que interese y sabiendo qué hacemos en cada momento.
  6. Copiar también /mnt si tenemos algún punto de montaje creado.
  7. Copiar también /usr o partes de /usr como /usr/icons. Esta es la carpeta en Arch o Chakra, en otras distros sería la carpeta equivalente.
En fin, esto al menos es lo que yo hago. También se puede crear una lista de aplicaciones que queremos volver a instalar. En mi caso no sé vivir sin virtualbox, libreoffice, firefox, xsane, tdesktop (telegram)...

Se agradecen comentarios con más trucos para hacer más fácil esta tarea.

Comentarios